En esta entrada nos salimos un poco de nuestros registros habituales, en los que hablamos planificación, gestión y marketing turístico para conectar dos de nuestras grandes pasiones, el vino y el rock’n’roll, aficiones que no están tan distantes de nuestros quehaceres diarios.
No en vano, al publicar este post, se nos viene a la cabeza el Plan de Enoturismo en Logroño que diseñamos hace ya unos años para Bodegas de Logroño y el Ayuntamiento de esta ciudad y en el que aconsejamos a sus responsables revisar el concepto de Catarsis «dejando» los cuartetos de música clásica, para «orientarse» a un target más interesante que hoy en día consume vino y que le gusta otro tipo de música. Y asi se diseño un Catasis mucho más atractivo en el que músicos como Ariel Rot, Coque Malla, Mikel Eretxun, Cristina Rosenvinge y otros grandes artistas de hoy pero que lo fueron mucho más ayer pasaron por las bodegas de la ciudad para ofrecer sus mejores canciones en acústico. Estos artistas son bastante más mediáticos y ayudaron a conectar el mundo del vino con el público y acercar la gente a las bodegas, que entendemos es lo que debemos hacer. Nos hicieron caso y el resultado fue mucho mejor del esperado.
Pero en esta entrada queríamos hablar de una nueva banda, The Winemakers (los enólogos) que unen como nadie el mundo del vino (¡Atención bodegas! esto no ocurre todos los días) con la música, con la mejor música, el rock’n’ roll de todos los tiempos, especialmente de los ’70, ’80, y ’90. Aunque tienen un gran espíritu joven, gracias sobre todo a Pilar de la Haya (voz cantante y winelover donde las haya) y a Charly (el batería, tío simpático, obrero del escenario, como él se define), la banda está formada por grandes artistas nacionales, muy reconocidos, auténticas leyendas de pop-rock español.
Juanma del Olmo, (Ex de Los Elegantes), al que recordaréis como tipo duro con la melena rubia, pegado como siempre a su Gibson negra (aunque ahora sin cigarro por la ley antitabaco) mueve la banda compenetrado totalmente con Charly Hens (Ex Elegante también). Dos grandes músicos que se entienden a la perfección. Completan la banda Steve Javier González, bajista de muchos grupos del panorama nacional y Basilio Martí (teclista de Antonio Vega), aunque éste último, el día que los vimos en el Honky Tonk no estuvo. Según nos contaba Pilar, que no para de hablar durante todo el concierto, transmitiendo su pasión por el vino, el buen rollo de una generación de músicos (y de gente en definitiva) bastante más sana de lo que nos encontramos hoy en día por ahí, se acompañan habitualmente de artistas invitados. Aquella noche estuvo Rafa de Los Desperados, otro crack de los 80 (junto a Fernando y el ya desaparecido Guille Martín). Fue una experiencia bonita donde las haya, donde pudimos escuchar temas de los Pretenders, Romantics, ZZ Top, The Cure, Tom Robinson o Bod Dylan, entre otros. Sólo eché en falta alguna canción en castellano (Soy tremendo, por ejemplo) .
Pilar se abrió una botellita de la Huesuda, un vino de Ariel Rot y se fue hacia arriba como vino que se va oxigenando. Nos regalaron una noche de rock’n’roll del bueno, de estas veces que te das cuenta que en el escenario hay músicos de los de verdad, de los buenos, de los de siempre y que crecen con el tiempo, como los grandes vinos.
Y además del buen rollito y las mejores guitarras, no faltaron caras conocidas de la movida madrileña, como Ramón Arroyo (los Secretos), Javier Teixidor (exMermelada y J.Teixi Band) en un lugar donde siempre da gusto tomarse una buena copa, como es el Honky Tonk.
Os animamos a que los conozcáis un poco más en su web http://www.thewinemakers.es , donde se hacen eco de su próximo concierto en el Museo Vivanco el próximo 17 de Octubre. Yo que vosotros no me los perdería, porque que estos tíos sí son Gran Reserva de verdad.
En esta entrada nos salimos un poco de nuestros registros habituales, en los que hablamos planificación, gestión y marketing turístico para conectar dos de nuestras grandes pasiones, el vino y el rock’n’roll, aficiones que no están tan distantes de nuestros quehaceres diarios.
No en vano, al publicar este post, se nos viene a la cabeza el Plan de Enoturismo en Logroño que diseñamos hace ya unos años para Bodegas de Logroño y el Ayuntamiento de esta ciudad y en el que aconsejamos a sus responsables revisar el concepto de Catarsis «dejando» los cuartetos de música clásica, para «orientarse» a un target más interesante que hoy en día consume vino y que le gusta otro tipo de música. Y asi se diseño un Catasis mucho más atractivo en el que músicos como Ariel Rot, Coque Malla, Mikel Eretxun, Cristina Rosenvinge y otros grandes artistas de hoy pero que lo fueron mucho más ayer pasaron por las bodegas de la ciudad para ofrecer sus mejores canciones en acústico. Estos artistas son bastante más mediáticos y ayudaron a conectar el mundo del vino con el público y acercar la gente a las bodegas, que entendemos es lo que debemos hacer. Nos hicieron caso y el resultado fue mucho mejor del esperado.
Pero en esta entrada queríamos hablar de una nueva banda, The Winemakers (los enólogos) que unen como nadie el mundo del vino (¡Atención bodegas! esto no ocurre todos los días) con la música, con la mejor música, el rock’n’ roll de todos los tiempos, especialmente de los ’70, ’80, y ’90. Aunque tienen un gran espíritu joven, gracias sobre todo a Pilar de la Haya (voz cantante y winelover donde las haya) y a Charly (el batería, tío simpático, obrero del escenario, como él se define), la banda está formada por grandes artistas nacionales, muy reconocidos, auténticas leyendas de pop-rock español.
Juanma del Olmo, (Ex de Los Elegantes), al que recordaréis como tipo duro con la melena rubia, pegado como siempre a su Gibson negra (aunque ahora sin cigarro por la ley antitabaco) mueve la banda compenetrado totalmente con Charly Hens (Ex Elegante también). Dos grandes músicos que se entienden a la perfección. Completan la banda Steve Javier González, bajista de muchos grupos del panorama nacional y Basilio Martí (teclista de Antonio Vega), aunque éste último, el día que los vimos en el Honky Tonk no estuvo. Según nos contaba Pilar, que no para de hablar durante todo el concierto, transmitiendo su pasión por el vino, el buen rollo de una generación de músicos (y de gente en definitiva) bastante más sana de lo que nos encontramos hoy en día por ahí, se acompañan habitualmente de artistas invitados. Aquella noche estuvo Rafa de Los Desperados, otro crack de los 80 (junto a Fernando y el ya desaparecido Guille Martín). Fue una experiencia bonita donde las haya, donde pudimos escuchar temas de los Pretenders, Romantics, ZZ Top, The Cure, Tom Robinson o Bod Dylan, entre otros. Sólo eché en falta alguna canción en castellano (Soy tremendo, por ejemplo) .
Pilar se abrió una botellita de la Huesuda, un vino de Ariel Rot y se fue hacia arriba como vino que se va oxigenando. Nos regalaron una noche de rock’n’roll del bueno, de estas veces que te das cuenta que en el escenario hay músicos de los de verdad, de los buenos, de los de siempre y que crecen con el tiempo, como los grandes vinos.
Y además del buen rollito y las mejores guitarras, no faltaron caras conocidas de la movida madrileña, como Ramón Arroyo (los Secretos), Javier Teixidor (exMermelada y J.Teixi Band) en un lugar donde siempre da gusto tomarse una buena copa, como es el Honky Tonk.
Os animamos a que los conozcáis un poco más en su web http://www.thewinemakers.es , donde se hacen eco de su próximo concierto en el Museo Vivanco el próximo 17 de Octubre. Yo que vosotros no me los perdería, porque que estos tíos sí son Gran Reserva de verdad.