28 junio, 2014

Creemos en un turismo gastronómico para todos

Últimamente estamos viendo cómo programas televisivos en torno a la gastronomía (Top Chef, Masterchef, …)  se convierten en plataformas educativas proyectando valores y principios relacionados con la cultura gastronómica de nuestro país (tradición, vanguardia, respeto por el producto, búsqueda de los sabores de siempre, fomento de los producto con figuras de calidad – D.O. e I.G.P.), valores que desde Dinamiza defendemos y promovemos en todos los proyectos de turismo gastronómico que desarrollamos (y van ya unos cuantos). Hablamos de fomentar la identidad de cada territorio en torno a sus paisajes, sus productos, sus recetas de toda la vida, ensalzar las características de las materias primas de cada lugar, la hospitalidad y la acogida, la cultura del detalle en la prestación del servicio…y no hace mucho pudimos ver en un programa televisivo un ejemplo de gastronomía inclusiva, o gastronomía accesible o cocina para todos los públicos.

Podríamos decir que la accesibilidad en turismo continúa siendo un reto a superar en muchos ámbitos de trabajo, en las distintas etapas de un viaje, desde que un turista se inspira hasta que vuelve a casa, pasa por distintas fases, todas ellas afectadas por la accesibilidad, bien en soportes web, transportes, alojamiento, visitando los recursos del destino, culturales, naturales, en la oferta complementaria…. y también en la gastronomía accesible, ya que es un aspecto a potenciar y trabajar, máxime cuando los trastornos alimenticios son cada día mayores.

Turismo Gastronómico DINAMIZA

En la mayor parte de proyectos que desarrollamos, seguimos encontrándonos con que la accesibilidad se asocia únicamente a las barreras físicas, aspecto que en estos tiempos debería estar ya superado, y esto se corrobora en los múltiples talleres de trabajo y en las  asistencias técnicas individualizadas.

Desde DINAMIZA intentamos trasladar la importancia que tiene cada eslabón de la cadena de valor de turismo en general y en el turismo enogastronómico en particular. Es un hecho que atravesamos momentos de ciertas dificultades económicas y que el empresariado en muchas ocasiones no puede hacer frente a grandes inversiones, de cara a abrirse a un turismo para todos, mucho más responsable. En esta línea, lo que sí que intentamos es hacer ver que, a través de ciertas medidas que no supondrían costes excesivos para un establecimiento, se puede conseguir una oferta turístico gastronómica más accesible, como disponer de platos cardiosaludables, característicos de la dieta mediterránea (algo que no es muy problemático en nuestro país) para personas con problemas cardiológicos, una carta con un tamaño de letra superior al normal, que serviría para las personas con deficiencia visual, abarcando en este caso a muchas otras personas con problemas de vista; en una bodega crear una visita accesible, donde el tacto, los olores, sabores, junto con una explicación detallada de los matices, conjugarían una experiencia enogastronómica para todos, que formaría parte de la oferta permanente del establecimiento y además aportaría un valor añadido para atraer a determinados segmentos de mercado .

Por otro lado, nos encontramos que en los últimos años las intolerancias y alergias alimentarias, o afecciones específicas, como la diabetes o el colesterol, han aumentado considerablemente en distintos rangos de edades. Es aquí donde se pone de manifiesto lo importante que es saber atender y entender a todo tipo de clientes, y en esta línea, es crucial que el personal en contacto con los turistas esté formado y sepa percibir qué necesitamos y transmitir honestamente las características de lo que ofrecemos. Es igualmente importante que desde la propia gestión del establecimiento se idee una oferta gastronómica accesible que atienda a la diversidad, fomentando la inclusión gastronómica, otorgando un valor añadido a la propia experiencia turística que todos podremos disfrutar.

A pesar de todo, las crisis siempre nos ofrecen oportunidades, en este caso además de ser más competitivos de abrirnos a colectivos cada día más significativos. Así lo vemos . ¿Qué os parece a vosotros?

 

 

 

28 junio, 2014

Creemos en un turismo gastronómico para todos

Últimamente estamos viendo cómo programas televisivos en torno a la gastronomía (Top Chef, Masterchef, …)  se convierten en plataformas educativas proyectando valores y principios relacionados con la cultura gastronómica de nuestro país (tradición, vanguardia, respeto por el producto, búsqueda de los sabores de siempre, fomento de los producto con figuras de calidad – D.O. e I.G.P.), valores que desde Dinamiza defendemos y promovemos en todos los proyectos de turismo gastronómico que desarrollamos (y van ya unos cuantos). Hablamos de fomentar la identidad de cada territorio en torno a sus paisajes, sus productos, sus recetas de toda la vida, ensalzar las características de las materias primas de cada lugar, la hospitalidad y la acogida, la cultura del detalle en la prestación del servicio…y no hace mucho pudimos ver en un programa televisivo un ejemplo de gastronomía inclusiva, o gastronomía accesible o cocina para todos los públicos.

Podríamos decir que la accesibilidad en turismo continúa siendo un reto a superar en muchos ámbitos de trabajo, en las distintas etapas de un viaje, desde que un turista se inspira hasta que vuelve a casa, pasa por distintas fases, todas ellas afectadas por la accesibilidad, bien en soportes web, transportes, alojamiento, visitando los recursos del destino, culturales, naturales, en la oferta complementaria…. y también en la gastronomía accesible, ya que es un aspecto a potenciar y trabajar, máxime cuando los trastornos alimenticios son cada día mayores.

Turismo Gastronómico DINAMIZA

En la mayor parte de proyectos que desarrollamos, seguimos encontrándonos con que la accesibilidad se asocia únicamente a las barreras físicas, aspecto que en estos tiempos debería estar ya superado, y esto se corrobora en los múltiples talleres de trabajo y en las  asistencias técnicas individualizadas.

Desde DINAMIZA intentamos trasladar la importancia que tiene cada eslabón de la cadena de valor de turismo en general y en el turismo enogastronómico en particular. Es un hecho que atravesamos momentos de ciertas dificultades económicas y que el empresariado en muchas ocasiones no puede hacer frente a grandes inversiones, de cara a abrirse a un turismo para todos, mucho más responsable. En esta línea, lo que sí que intentamos es hacer ver que, a través de ciertas medidas que no supondrían costes excesivos para un establecimiento, se puede conseguir una oferta turístico gastronómica más accesible, como disponer de platos cardiosaludables, característicos de la dieta mediterránea (algo que no es muy problemático en nuestro país) para personas con problemas cardiológicos, una carta con un tamaño de letra superior al normal, que serviría para las personas con deficiencia visual, abarcando en este caso a muchas otras personas con problemas de vista; en una bodega crear una visita accesible, donde el tacto, los olores, sabores, junto con una explicación detallada de los matices, conjugarían una experiencia enogastronómica para todos, que formaría parte de la oferta permanente del establecimiento y además aportaría un valor añadido para atraer a determinados segmentos de mercado .

Por otro lado, nos encontramos que en los últimos años las intolerancias y alergias alimentarias, o afecciones específicas, como la diabetes o el colesterol, han aumentado considerablemente en distintos rangos de edades. Es aquí donde se pone de manifiesto lo importante que es saber atender y entender a todo tipo de clientes, y en esta línea, es crucial que el personal en contacto con los turistas esté formado y sepa percibir qué necesitamos y transmitir honestamente las características de lo que ofrecemos. Es igualmente importante que desde la propia gestión del establecimiento se idee una oferta gastronómica accesible que atienda a la diversidad, fomentando la inclusión gastronómica, otorgando un valor añadido a la propia experiencia turística que todos podremos disfrutar.

A pesar de todo, las crisis siempre nos ofrecen oportunidades, en este caso además de ser más competitivos de abrirnos a colectivos cada día más significativos. Así lo vemos . ¿Qué os parece a vosotros?