El Monitor de Enoturismo de la DOCa Rioja es una herramienta desarrollada por DINAMIZA para el Consejo Regulador en 2018 con el objetivo de observar y monitorizar la actividad enoturística en el conjunto de la Denominación. Esta herramienta convierte a la DOCa Rioja en el único territorio español con D.O. que cuenta con un instrumento de este tipo, que permite conocer el fenómeno enoturístico en profundidad y ofrece información de gran utilidad para la planificación y gestión del destino y las propias bodegas de la DOCa Rioja.
Entre otros, esta herramienta de monitorización específica del enoturismo permite conocer datos sobre la oferta y demanda de enoturismo en Rioja, el impacto económico de la actividad enoturística en el conjunto de la Denominación, el comportamiento del viajero en el destino, etc.; favoreciendo con ello un análisis de la evolución en el tiempo de los indicadores (cuenta ya con 5 informes anuales), así como la comparación de la DOCa Rioja con otros destinos enoturísticos nacionales e internacionales.
Los datos de 2022 muestran que el enoturismo en Rioja está cada vez más cerca de la recuperación total
Con 748.345 visitas en 2022, un 62,64% más que el año anterior, Rioja vuelve a posicionarse como referente y motor de la actividad enoturística española. Consolida así su recuperación en el ámbito del enoturismo, recortando cada vez más la diferencia con los datos prepandemia, con una variación de -12,79% con respecto a 2019, cuando las bodegas de Rioja recibieron la cifra record de 860.000 visitas.
El Monitor de Enoturismo de la DOCa Rioja 2022 recoge, entre otros indicadores, que el gasto medio del visitante en bodega asciende a 36,53 euros, un 20,68% superior al de 2021, superando incluso el gasto prepandemia en un 5,40%. Por su parte, el gasto medio por persona y día en la región se estima en 217,67 euros.
En conjunto, el impacto global del enoturismo en Rioja fue de 155.528.954 euros, casi un 50% (49,93%) más que en 2021, generando un mayor valor tanto para las bodegas de la Denominación y la propia región, como para el resto del ecosistema turístico y enoturístico español.
Otro de los principales resultados positivos que se pueden extraer del informe es la recuperación de la demanda internacional, que se sitúa en un 29,12% de la demanda total (vs. 20,30% en 2021), confirmando así la tendencia positiva hacia la restauración total pospandemia del enoturismo en Rioja.
De hecho, los datos de visitantes a Rioja en 2022 constatan que el enoturismo en la Denominación se recupera a un ritmo superior al del sector turístico español, cuya demanda internacional en 2022 se situó un 14% por debajo de la de 2019, mientras que con respecto a los datos de visitantes prepandemia, Rioja registra una variación del -12,79%.
Otro de los aspectos a destacar es la mayor apuesta del sector por el valor, lo que se pone de manifiesto en el aumento de los precios de las actividades y experiencias enoturísticas ofrecidas por las bodegas de la DOCa Rioja. Esto ha permitido este último año una mayor recuperación del impacto económico (-10,22% con respecto a 2019), que lo hace a un mejor ritmo que el número de visitantes (-12,79% vs. 2019).
Asimismo, cabe destacar la menor estacionalización que el enoturismo ha mostrado en la DOCa Rioja durante 2022. Históricamente la actividad enoturística se concentra en otoño y primavera, aunque en esta ocasión los meses veraniegos, especialmente agosto, se ha comportado de un modo excelente, superando incluso el dato registrado para este mismo mes en 2019. Esta tendencia invita a pensar que cada vez más viajeros eligen también Rioja durante sus vacaciones estivales.
Algunas reflexiones para aprovechar el momento de oportunidad actual
En DINAMIZA, consultora especializada en enoturismo y encargada de la realización del Monitor de Enoturismo de la DOCa Rioja, estamos convencidos de que el sector se encuentra inmerso en un punto de inflexión, que se presenta como un momento de gran oportunidad para revisar las estrategias de enoturismo y consolidar los proyectos de enoturismo.
Esto pasa, en primer lugar, por mejorar el producto enoturístico de Rioja, tanto a nivel público como privado, creando experiencias de mayor valor, más personalizadas y adaptadas a las necesidades de un enoturista cada vez más exigente, que permitan diferenciar Rioja de otros destinos enoturísticos y, a la vez, generar una mayor rentabilidad a las bodegas.
Asimismo, para conseguir una mayor adaptación a las tendencias de la demanda, es necesario impulsar la digitalización tanto a nivel público como privado, de cara a mejorar la experiencia del visitante durante todo el ciclo de viaje (inspiración, información, planificación, reserva, experiencia en la propia bodega o destino, fidelización…). Este esfuerzo debe llevarse a cabo conjuntamente, tanto por parte de las bodegas como del propio Consejo Regulador, quien ya se encuentra trabajando en este sentido con la renovación de la web de la DOCa Rioja, en la que se incluirán, entre otros elementos, el relato enoturístico de la región vitivinícola y contenido de valor para los viajeros de Rioja, desarrollados por DINAMIZA.
Otro de los pilares por los que merece la pena apostar en este momento es la sostenibilidad. Esta tendencia consolidada en los últimos años puede ponerse en marcha con pequeñas acciones que, en conjunto, pueden suponer un gran aporte para la región, la población local y el medioambiente. Entre ellas, destacan la puesta en valor de espacios naturales (viñedo…), el impulso de la movilidad sostenible en las visitas y servicios turísticos, la recuperación del patrimonio (barrios históricos de bodegas, guardaviñas, lagares…), la apuesta por los proveedores locales, etc.
Por último, es necesario destacar que, si bien el enoturismo es el producto estrella de la Denominación y, según los datos arrojados por el Monitor de Enoturismo 2022, la recuperación total de la actividad enoturística en Rioja se encuentra cada vez más cerca, el momento de oportunidad en el que nos encontramos actualmente debe animar a la región y a sus bodegas no sólo a centrar sus esfuerzos en alcanzar los datos prepandemia, sino a superarlos, como lo están haciendo ya muchas bodegas.
El crecimiento de la demanda enoturística de Rioja pasa, por un lado, por su internacionalización. La demanda nacional representa una buena parte de los visitantes a la región y se encuentra ya muy consolidada. Por tanto, el crecimiento en el número de visitantes debe venir por parte de los mercados internacionales. Asimismo, es necesario acercar el enoturismo al público general, apostar por su democratización y hacerlo más accesible y atractivo para segmentos como los jóvenes, a los que debemos acercarnos con una propuesta mucho más fresca y lúdica, cercana a sus intereses.
El Monitor de Enoturismo de la DOCa Rioja es una herramienta desarrollada por DINAMIZA para el Consejo Regulador en 2018 con el objetivo de observar y monitorizar la actividad enoturística en el conjunto de la Denominación. Esta herramienta convierte a la DOCa Rioja en el único territorio español con D.O. que cuenta con un instrumento de este tipo, que permite conocer el fenómeno enoturístico en profundidad y ofrece información de gran utilidad para la planificación y gestión del destino y las propias bodegas de la DOCa Rioja.
Entre otros, esta herramienta de monitorización específica del enoturismo permite conocer datos sobre la oferta y demanda de enoturismo en Rioja, el impacto económico de la actividad enoturística en el conjunto de la Denominación, el comportamiento del viajero en el destino, etc.; favoreciendo con ello un análisis de la evolución en el tiempo de los indicadores (cuenta ya con 5 informes anuales), así como la comparación de la DOCa Rioja con otros destinos enoturísticos nacionales e internacionales.
Los datos de 2022 muestran que el enoturismo en Rioja está cada vez más cerca de la recuperación total
Con 748.345 visitas en 2022, un 62,64% más que el año anterior, Rioja vuelve a posicionarse como referente y motor de la actividad enoturística española. Consolida así su recuperación en el ámbito del enoturismo, recortando cada vez más la diferencia con los datos prepandemia, con una variación de -12,79% con respecto a 2019, cuando las bodegas de Rioja recibieron la cifra record de 860.000 visitas.
El Monitor de Enoturismo de la DOCa Rioja 2022 recoge, entre otros indicadores, que el gasto medio del visitante en bodega asciende a 36,53 euros, un 20,68% superior al de 2021, superando incluso el gasto prepandemia en un 5,40%. Por su parte, el gasto medio por persona y día en la región se estima en 217,67 euros.
En conjunto, el impacto global del enoturismo en Rioja fue de 155.528.954 euros, casi un 50% (49,93%) más que en 2021, generando un mayor valor tanto para las bodegas de la Denominación y la propia región, como para el resto del ecosistema turístico y enoturístico español.
Otro de los principales resultados positivos que se pueden extraer del informe es la recuperación de la demanda internacional, que se sitúa en un 29,12% de la demanda total (vs. 20,30% en 2021), confirmando así la tendencia positiva hacia la restauración total pospandemia del enoturismo en Rioja.
De hecho, los datos de visitantes a Rioja en 2022 constatan que el enoturismo en la Denominación se recupera a un ritmo superior al del sector turístico español, cuya demanda internacional en 2022 se situó un 14% por debajo de la de 2019, mientras que con respecto a los datos de visitantes prepandemia, Rioja registra una variación del -12,79%.
Otro de los aspectos a destacar es la mayor apuesta del sector por el valor, lo que se pone de manifiesto en el aumento de los precios de las actividades y experiencias enoturísticas ofrecidas por las bodegas de la DOCa Rioja. Esto ha permitido este último año una mayor recuperación del impacto económico (-10,22% con respecto a 2019), que lo hace a un mejor ritmo que el número de visitantes (-12,79% vs. 2019).
Asimismo, cabe destacar la menor estacionalización que el enoturismo ha mostrado en la DOCa Rioja durante 2022. Históricamente la actividad enoturística se concentra en otoño y primavera, aunque en esta ocasión los meses veraniegos, especialmente agosto, se ha comportado de un modo excelente, superando incluso el dato registrado para este mismo mes en 2019. Esta tendencia invita a pensar que cada vez más viajeros eligen también Rioja durante sus vacaciones estivales.
Algunas reflexiones para aprovechar el momento de oportunidad actual
En DINAMIZA, consultora especializada en enoturismo y encargada de la realización del Monitor de Enoturismo de la DOCa Rioja, estamos convencidos de que el sector se encuentra inmerso en un punto de inflexión, que se presenta como un momento de gran oportunidad para revisar las estrategias de enoturismo y consolidar los proyectos de enoturismo.
Esto pasa, en primer lugar, por mejorar el producto enoturístico de Rioja, tanto a nivel público como privado, creando experiencias de mayor valor, más personalizadas y adaptadas a las necesidades de un enoturista cada vez más exigente, que permitan diferenciar Rioja de otros destinos enoturísticos y, a la vez, generar una mayor rentabilidad a las bodegas.
Asimismo, para conseguir una mayor adaptación a las tendencias de la demanda, es necesario impulsar la digitalización tanto a nivel público como privado, de cara a mejorar la experiencia del visitante durante todo el ciclo de viaje (inspiración, información, planificación, reserva, experiencia en la propia bodega o destino, fidelización…). Este esfuerzo debe llevarse a cabo conjuntamente, tanto por parte de las bodegas como del propio Consejo Regulador, quien ya se encuentra trabajando en este sentido con la renovación de la web de la DOCa Rioja, en la que se incluirán, entre otros elementos, el relato enoturístico de la región vitivinícola y contenido de valor para los viajeros de Rioja, desarrollados por DINAMIZA.
Otro de los pilares por los que merece la pena apostar en este momento es la sostenibilidad. Esta tendencia consolidada en los últimos años puede ponerse en marcha con pequeñas acciones que, en conjunto, pueden suponer un gran aporte para la región, la población local y el medioambiente. Entre ellas, destacan la puesta en valor de espacios naturales (viñedo…), el impulso de la movilidad sostenible en las visitas y servicios turísticos, la recuperación del patrimonio (barrios históricos de bodegas, guardaviñas, lagares…), la apuesta por los proveedores locales, etc.
Por último, es necesario destacar que, si bien el enoturismo es el producto estrella de la Denominación y, según los datos arrojados por el Monitor de Enoturismo 2022, la recuperación total de la actividad enoturística en Rioja se encuentra cada vez más cerca, el momento de oportunidad en el que nos encontramos actualmente debe animar a la región y a sus bodegas no sólo a centrar sus esfuerzos en alcanzar los datos prepandemia, sino a superarlos, como lo están haciendo ya muchas bodegas.
El crecimiento de la demanda enoturística de Rioja pasa, por un lado, por su internacionalización. La demanda nacional representa una buena parte de los visitantes a la región y se encuentra ya muy consolidada. Por tanto, el crecimiento en el número de visitantes debe venir por parte de los mercados internacionales. Asimismo, es necesario acercar el enoturismo al público general, apostar por su democratización y hacerlo más accesible y atractivo para segmentos como los jóvenes, a los que debemos acercarnos con una propuesta mucho más fresca y lúdica, cercana a sus intereses.
