22 julio, 2013

Dinamizar un destino turístico (sin varita mágica)

No hay varitas mágicas, no, ni es cuestión de suerte posicionar un producto turístico.  Para conseguir resultados, hoy más que nunca, es cuestión de trabajar unidos todos los agentes de un destino en una misma dirección,  con criterio, con una visión compartida, creyendo firmemente en ello y sabiendo que se debe apostar por ensalzar los principales valores y elementos diferenciales del destino. Esto es lo que ha hecho la Ruta del Vino de Ribera del Guadiana. Desde hace varios años, contando con el apoyo de las distintas instituciones (Diputación de Badajoz, Gobierno de Extremadura, Ayuntamientos, Consejo Regulador) todos los actores del territorio han trabajado unidos, en una misma dirección y creyendo en sus verdaderas posibilidades.

Cartel Primavera

 

La certificación como Ruta del Vino de España que conceden ACEVIN y Turespaña no es más que un reconocimiento al trabajo bien hecho por el sector empresarial (bodegueros, hosteleros, hoteleros, empresarios de actividades, comercios, … ) y también hay que destacar en este caso a responsables políticos que han dejado de lado las diferencias en pro de impulsar un territorio turísticamente.  El eje temático de referencia ha sido el vino, pero quizá no el de mayor notoriedad en una denominación de origen. Bajo los principios del desarrollo sostenible, se ha querido impulsar la excelencia de la naturaleza (paisajes de viña y olivo, dehesa, zonas ZEPA, …), el patrimonial (con la Ruta de la Plata, como elemento predominante) y gastronómica gracias a la riqueza de productos que nos ofrecen las tierras de Extremadura (con 10 D.O. propias, 4 compartidas y 2 IGP).

Y como muestra de ello, la Primavera Enogastronómica, un evento singular, sobre todo por su duración (todos los meses de primavera), diversidad (está llenando los diferentes municipios de la Ruta de distintas actividades relacionadas con el mundo del vino, el cava y la gastronomía) y basado en los recursos endógenos del destino (combina el enoturismo  con la naturaleza, el arte, la cultura y las tradiciones extremeñas.

Un evento que está dando que hablar por sus propuestas destacadas: ‘vespaterapia’ entre viñedos, vivencias con bodegueros, paseos en globo, menús maridados con D.O, degustaciones de productos gourmet, recreaciones históricas y visitas teatralizadas, rutas en burro entre viñedos, safaris fotográficos, talleres de pintura, catas singulares en bodegas y un sinfín de experiencias que están dando la oportunidad a todos los visitantes de  la Ruta del Vino Ribera del Guadiana  de disfrutar con los cinco sentidos.

 

22 julio, 2013

Dinamizar un destino turístico (sin varita mágica)

No hay varitas mágicas, no, ni es cuestión de suerte posicionar un producto turístico.  Para conseguir resultados, hoy más que nunca, es cuestión de trabajar unidos todos los agentes de un destino en una misma dirección,  con criterio, con una visión compartida, creyendo firmemente en ello y sabiendo que se debe apostar por ensalzar los principales valores y elementos diferenciales del destino. Esto es lo que ha hecho la Ruta del Vino de Ribera del Guadiana. Desde hace varios años, contando con el apoyo de las distintas instituciones (Diputación de Badajoz, Gobierno de Extremadura, Ayuntamientos, Consejo Regulador) todos los actores del territorio han trabajado unidos, en una misma dirección y creyendo en sus verdaderas posibilidades.

Cartel Primavera

 

La certificación como Ruta del Vino de España que conceden ACEVIN y Turespaña no es más que un reconocimiento al trabajo bien hecho por el sector empresarial (bodegueros, hosteleros, hoteleros, empresarios de actividades, comercios, … ) y también hay que destacar en este caso a responsables políticos que han dejado de lado las diferencias en pro de impulsar un territorio turísticamente.  El eje temático de referencia ha sido el vino, pero quizá no el de mayor notoriedad en una denominación de origen. Bajo los principios del desarrollo sostenible, se ha querido impulsar la excelencia de la naturaleza (paisajes de viña y olivo, dehesa, zonas ZEPA, …), el patrimonial (con la Ruta de la Plata, como elemento predominante) y gastronómica gracias a la riqueza de productos que nos ofrecen las tierras de Extremadura (con 10 D.O. propias, 4 compartidas y 2 IGP).

Y como muestra de ello, la Primavera Enogastronómica, un evento singular, sobre todo por su duración (todos los meses de primavera), diversidad (está llenando los diferentes municipios de la Ruta de distintas actividades relacionadas con el mundo del vino, el cava y la gastronomía) y basado en los recursos endógenos del destino (combina el enoturismo  con la naturaleza, el arte, la cultura y las tradiciones extremeñas.

Un evento que está dando que hablar por sus propuestas destacadas: ‘vespaterapia’ entre viñedos, vivencias con bodegueros, paseos en globo, menús maridados con D.O, degustaciones de productos gourmet, recreaciones históricas y visitas teatralizadas, rutas en burro entre viñedos, safaris fotográficos, talleres de pintura, catas singulares en bodegas y un sinfín de experiencias que están dando la oportunidad a todos los visitantes de  la Ruta del Vino Ribera del Guadiana  de disfrutar con los cinco sentidos.